Se va gestando una visita histórica, la de Gorbachev a la Checoslovaquia de Gustav Husak (75) (a la derecha de la foto, con Breznev.
En principio, Gorbachev ya tendría que haber llegado hoy a Praga, pero un "curioso" resfriado ha aplazado esta visita. Las malas lenguas dicen que tiene que ver con las dinámicas internas del Partido Comunista de Checoslovaquia, donde se está formando un extraño triángulo nada amoroso. Por un lado, el sector más ortodoxo del partido, que no quiere ni oír hablar de reformas, por otro lado los partidarios de las reformas "a lo Gorbachev" que quiere llevar a cabo Gustav Husak, y por otro, el sector más revolucionario y joven, que apuesta por una democracia de corte occidental.
El equipo de Gorbachev parece haber aconsejado al Premier soviético que ponga en pausa la visita hasta ver qué panorama se va a encontrar realmente en Checoslovaquia, especialmente con una población que todavía guarda en la memoria la invasión soviética que puso fin a la Primavera de Praga el 20 de agosto de 1968.
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