ENTIERRO DE GONZALO RUIZ

Ayer se enterró en Mataporquera (Cantabria) a Gonzalo Ruiz. Un entierro multitudinario, con más de 15000 compañeros y sindicalistas que quisieron homenajear a este obrero de Forjas y Aceros de Reinosa, muerto en la madrugada del miércoles tras no superar los efectos de la inhalación de los botes de humo lanzados por la Guardia Civil durante los incidentes en Reinosa el pasado Jueves Santo.

Al entierro fueron también el secretario general del PCE (Partido Comunista de España) Marcelino Iglesias y el de Comisiones Obreras, Marcelino Camacho, así como el presidente del Gobierno de Cantabria, Ángel Díaz de Entresotos.

Marcelino Iglesias hizo unas declaraciones contundentes al ser preguntado por los periodistas: "Si después de la muerte de Gonzalo Ruiz, llámese asesinato, no ruedan cabezas en algún Ministerio, hay que concluir que la democracia española está enferma. Esta es la consecuencia de la actuación de un Gobierno que no gobierna, sino que manda". En concreto, Iglesias solicitó la dimisión de Barrionuevo, ministro del interior, Luis Roldán, director general de la Guardia Civil y de Antonio Pallarés, delegado del Gobierno central en Cantabria.

La respuesta social ha sido enorme en Cantabria, especialmente en la comarca de Campoo (por donde ha pasado la Vuelta hace escasos días). Ayer hicieron huelga en toda la comarca como homenaje a Ruiz. La gente acudió multitudinariamente al entierro, recorriendo a pie los 15 kms que separan Reinosa de Mataporquera. 2000 Personas se plantaron frente a la sede del delegado del Gobierno en Santander, para pedir su dimisión.

Otro punto controvertido parece ser el estrictamente médico. Gonzalo Ruiz fue dado de alta tres veces desde su primer ingreso en el Hospital de Valdecillas (Santander). Fue después de volver a necesitar un cuarto ingreso que los médicos decidieron que debía ingresar en la unidad de politrauma del hospital donde ya no hubo una cuarta alta. Se ha abierto una inspección interna en el Hospital de Valdecillas para saber si se han aplicado correctamente los protocolos o ha habido negligencia.

En el resto de España ha habido minuto de silencio como homenaje al trabajador muerto, especial y significativa ha sido la respuesta en Cataluña, con un parón en todos los transportes.

Muy significativo también el comunicado de apoyo a la familia y compañeros del fallecido por parte del Sindicato Autónomo de la Policía.