La situación en los territorios ocupados de Gaza, Cisjordania y Jerusalén está tornándose endiabladamente complicada. Violentos disturbios entre jóvenes palestinos y el ejército israelí - TSahal - están elevando la tensión en toda la zona de Oriente Medio.
Sería muy disparatado por mi parte decir "todo comenzó cuando" porque este conflicto es tan antiguo como el propio mundo. Pero para acotar, podemos decir que esta revuelta comenzó hace una semana con el asesinato de un joven israelí en Jerusalén por parte de unos palestinos. El ejército israelí tomó represalias matando a varios palestinos "radicales" (según terminología israelí) sin que se supiera si tenían que ver o no con el asesinato en Jerusalén. Los disturbios comenzaron en la zona de Khan Junes (Gaza) y en la orilla occidental del río Jordán. En la primera semana de disturbios - del 9 al 16 de diciembre - han muerto 7 palestinos ( u 8 según las fuentes) a tiros de las patrullas militares. Gaza es un polvorín, si a eso le sumamos el grado de hacinamiento en la que están viviendo - 8.000 personas por kilómetro cuadrado, el resultado es imprevisible.
Los palestinos atacan con lo que encuentran a estas patrullas, piedras, palos, coktail molotovs, El ejército responde disparando a matar a la cabeza de las manifestaciones.
Las manifestaciones tardaron poco en contagiarse a Cisjordania, en especial la zona de Nablus. Jóvenes con las caras tapadas con las típicas kefias palestinas (ver la foto) atacaron a las patrullas israelís. Los jóvenes portaban las prohibidas banderas palestinas. En Nablus la policía de fronteras también ha actuado con contundencia, provocando varios muertos y heridos entre los palestinos. Intento ser objetivo con este tema, y que ninguna muerte está justificada, pero recordemos que los palestinos no se están manifestando precisamente de forma pacífica.
En Israel hay dos tendencias: una más dura, defendida por el Likud (Consolidación) dice que Israel no debe irse de los territorios ocupados, mientras que los laboristas defienden la negociación con los palestinos. Por otro lado la Liga Arabe mira para otro lado.
Hace unos días, las manifestaciones violentas palestinas se "contagiaron" en Jerusalén y para poner un poco más de gasolina, el pasado viernes - día santo para los musulmanes - el primer ministro de Israel, Yithzak Shamir (72) fue a visitar unas excavaciones arqueológicas que Israel está haciendo cerca de la explanada de las mezquitas.
El ministro de defensa de Israel, Yitzhak Rabin (65) ha dicho "que reprimirán con contundencia cualquier manifestación violenta por parte de los palestinos". El encargado de llevar a cabo esta represión está siendo el general Ariel Sharon (59)
A día de hoy llevamos 38 muertos palestinos.
Hay varios hechos que están sorprendiendo sobre esta revuelta palestina, pero se pueden resumir en dos: la extrema violencia con la que están actuando los manifestantes palestinos (veo que no sorprende la del ejército israelí) y por otro lado, que este rebrote violento es independiente de la OLP (Organización Liberación de Palestina) y de su máximo dirigente, Jassir Arafat (58)
La comunidad internacional está pidiendo a Israel que se corte un poco a la hora de reprimir a los palestinos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario