Me enseñó un profesor de historia que pocas cosas sitúan tan bien un contexto histórico que una portada de periódico. Le pregunté si cualquier portada, cualquier periódico. El profe me contestó que sí, porque es una enorme fuente de datos para el historiador. Continuaba diciendo; "si en la portada salen cosas intrascendentes es señal de cierta estabilidad de ese periodo". Me imagino que eso es lo que demuestra esta portada. Durante este mes se habla de un montón de temas, como bien sabréis. Desde los más intrascendentes - bueno, ya me entendéis- como es hablar de la crisis del Barça o las deudas con Hacienda de Lola Flores a temas más serios como la enésima intentona militar en Filipinas, la complicada situación en el Golfo Pérsico, donde parece que suenan tambores de guerra contra Irán, las negociaciones del Gobierno González con la banda terrorista ETA (Mientras se suceden los éxitos en la lucha antiterrorista a los dos lados de los Pirineos). Y en Cataluña, las reclamaciones estatutarias del "president" Pujol.
....Pero la Tierra sigue dando vueltas, más o menos tranquila
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